La hermosa región de Alsacia-Lorena en Francia ofrece muchos hallazgos interesantes. A continuación ofrecemos una guía para esta parte de Francia incluyendo su clima y delicias gastronómicas.
Alsacia-Lorena tiene 6 provincias que consisten en; Alto Rin, Bajo Rin, Meurthe-et-Moselle, Meuse, Moselle, Vosges, cubriendo el noreste de la región de Francia
Clima: El clima es muy similar a la del sur de Inglaterra, con inviernos fríos y veranos cálidos, pero raramente con temperaturas extremas. La lluvia es bastante alta, con mayores precipitaciones entre mayo y junio.
La Región: Alsacia-Lorena ha logrado mantener una fuerte identidad, a pesar de su historia muy accidentada. La zona, y varias partes de la misma, han sido alternativamente alemanas o francesas en muchas ocasiones durante los siglos. Lorena tiene una tradición de lengua francesa, mientras que Alsacia tiene más ciudadanos de habla alemana, pero toda la región ha sido parte de Francia desde 1945.
Nancy es la antigua capital de Lorena, y Estrasburgo es la capital de Alsacia. Estrasburgo es la sede de muchas industrias, pero sigue siendo una ciudad con encanto, con casas de madera apoyadas entre si y vista hacia las calles. Los edificios antiguos de esta región en su conjunto son una reminiscencia de las casas de pan de jengibre.
El paisaje de esta hermosa zona abarca los campos verdes y gran cantidad de viñedos, que suelen ofrecer degustaciones de vino. Otras visitas van desde los sombríos, penosos e inquietantes campos de concentración de la 2ª Guerra Mundial, a la fascinante fábrica Kronenburg en Estrasburgo – ¡Todos vamos a saber que ha estado allí desde 1664!
Gastronomía: La comida y la bebida de Alsacia-Lorena tienen mucho en común con la de su vecino alemán. ¡El vino de Alsacia es algo que no debe perderse! Los vinos blancos tienden a ser excesivamente florales y frutales, lo que los hacen muy satisfactorios para beberlos solos, pero con suficiente fuerza para acompañar a la mayoría de los alimentos.
Alimentación muy sabia, Alsacia-Lorena es la casa de sauerkraut, o “croute-chou” en francés. Los franceses aman este plato, que no es más que simplemente la col o repollo en vinagre. Por lo general, se cocina con una amplia selección de otras delicias, y vale la pena probarlo. Otros alimentos locales a tener en cuenta incluyen el famoso quiche Lorena (tarta salada), foie gras (hígado graso), embutidos, cerveza y los deliciosos pasteles que se encuentran en las abultadas ventanas de las increíbles pastelerías.
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